Cuarto día: NÁPOLES
Ya percibimos las huellas de los españoles en éstas tierras y realmente, el sabor castellano se deja sentir por muchos rincones de la ciudad, pues durante dos siglos el virreinato español (1503-1707) y la llegada de los Borbones (1734) gobernaron el Reino de Nápoles hasta el 1860, dejaron su impronta con destacados monumentos y obras de arte.
El gigante omnipresente de Vesubio se dirige hacia la ciudad, con las colinas fructuosas de la Península Sorrento que se sumerge a la costa Amalfi, sobre un lado, y a la Isla de Capri, Ischia y Procida hacia el mar.
La elección es fácil: La ciudad de Nápoles, Pompeya o la isla de Capri.
Opiniones de otros cruceristas
- "En Napoli el barco casi llega en la ciudad que podeis visitar andando o en bus tuistic. Si quereis ir a Pompeya a pocos minutos hay la estacion de trenes que en menos de media hora os llevara. Si quereis ir a Capri podeis coger el ferry rapido que en 20 minutos os dejara alli".
- "Napoles (55 € por persona), os llevan a Pompeya, a mi me gusto, aunque despues de ver Roma y Florencia es distinto, os llevan y esta es mejor con guia. Podeis confirmarnos si POMPEYA esta cerrado aun cuando vayamos. EL PUERTO DE NAPOLES ESTA EN LA MISMA CIUDAD, EN CUANTO SE SALE DEL PUERTO SE PUEDE VER EL CASTILLO, HOY EN DIA EL AYUNTAMIENTO DE LA CIUDAD, SI SE VA POR LA ZONA DEL CASTILLO SE PUEDE VER LA FACHADA DE LA OPERA, LAS GALERIAS, COPIA DE LAS DE MILAN,ETC.LOS MAS SOLICITADO SUELE SER LAS RUINAS DE POMPEYA.NEGOCIAR CON UN TAXI ES LO MAS ECONOMICO. LAS ENTRADAS LAS PUEDES COMPRAR EN EL RECINTO Y TE DAN UN PLANO CON UN LIBRITO QUE TE DA LAS EXPLICACIONES EN CASTELLANO".
Material gráfico previo
GALERÍA DE FOTOS DE NUESTRO CRUCERO
